El Banco de México (Banxico) decidió aumentar en 50 puntos base la Tasa de Interés Interbancaria, al situarla en un nivel récord de 10.50 por ciento.
La decisión de política monetaria al interior de la Junta de Gobierno del Banxico no fue unánime, ya que el subgobernador, Gerardo Esquivel, votó a favor de que se incrementara en 25 puntos base la Tasa de Interés, la cual quedaría en 10.25 por ciento.
La Junta de Gobierno consideró los retos para la conducción de la política monetaria ante el apretamiento de las condiciones financieras globales, el entorno de incertidumbre, las presiones inflacionarias acumuladas de la pandemia y del conflicto geopolítico, y la posibilidad de mayores afectaciones a la inflación, así como la postura monetaria que ya se ha alcanzado en este ciclo alcista.
De acuerdo con el comunicado del banco central, la inflación general continuó disminuyendo en noviembre para ubicarse en 7.80%, reflejando la reducción del componente no subyacente.
En cambio, la inflación subyacente mantuvo su tendencia al alza, para ubicarse en 8.51%. La inflación general como la subyacente fueron menores que las expectativas de los analistas.
Por su parte, las expectativas de inflación para 2022 y 2023 disminuyeron para la general, mientras que para la subyacente volvieron a ajustarse moderadamente al alza. Las de mediano y largo plazos se mantuvieron estables, si bien por arriba de la meta.
Se sigue anticipando que la inflación converja a la meta de 3% en el tercer trimestre de 2024. Estas previsiones están sujetas a los siguientes riesgos:
Persistencia de la inflación subyacente en niveles elevados; presiones inflacionarias externas derivadas de la pandemia; presiones en los precios agropecuarios y energéticos por el conflicto geopolítico; depreciación cambiaria; y mayores presiones de costos.
En su decisión más reciente, destacó el Banco de México, la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos aumentó el rango objetivo para la tasa de fondos federales en 50 puntos base, después de cuatro incrementos consecutivos de 75 puntos base.
Asimismo, agregó, anticipó incrementos adicionales.
Entre los riesgos globales destacan los asociados a la pandemia, la prolongación de las presiones inflacionarias, el agravamiento de las tensiones geopolíticas y condiciones monetarias y financieras más apretadas.
Cerca del techo, pero con incertidumbre
De acuerdo con el análisis del Grupo Financiero Monex, aunque parece claro que Banxico está cerca del techo, el panorama de política monetaria en nuestro país no deja de ser complejo.
El análisis explicó que los pronósticos de inflación subyacente para los cierres de 2022 (8.5%) y 2023 (4.3%) fueron revisados al alza y siguen estando fuera del objetivo, lo que deja ver que la amenaza sigue latente.
“Además, consideramos que no hay mucha disposición al interior de la Junta para tomar medidas distintas de las de la Fed, sobre todo si parar el ciclo en febrero implica amplificar las presiones de depreciación del tipo de cambio”, concluyó el análisis.
Fuente: Proceso