Las protestas por el asesinato de Giovanni López subieron de tono y terminaron en enfrentamientos entre el contingente y policías que intentaban frenarlos.
Durante la movilización, manifestantes incendiaron dos patrullas y rompieron uno de los accesos a Palacio de Gobierno.
En la calle Madero, los policías estatales dispersaron a los manifestantes con palos, sillas y gas lacrimógeno.
Videos que circulan en redes sociales muestran el momento en el que un uniformado agredió con un palo a una mujer que se encontraba cerca del Palacio de Gobierno de Jalisco.
Hubo por lo menos tres policías y otro grupo de jóvenes heridos.
Luego, los elementos persiguieron a los manifestantes por Maestranza, cerca de López Cotilla, y detuvieron a al menos cinco hombres, dos de los cuales se identificaron como Diego Bernache Fernández y Alejandro Alejo Amezcua.
Sobre Avenida Juárez, cerca del Paseo del Alcalde, policías motorizados intentaron dispersar a los manifestantes, quienes le lanzaron un líquido inflamable a uno de los gendarmes, ocasionándole quemaduras en la espalda. El fuego fue apagado por los compañeros del oficial, quienes lo alejaron del lugar.
El contingente, de unas 150 personas, partió del Parque Revolución por Avenida Juárez, y al llegar a las oficinas del recinto, intentaron derribar la puerta y dejaron pintas con leyendas como "Abuso de poder" y "Estado asesino". Después, irrumpieron en las oficinas de atención ciudadana, donde dañaron mobiliario de oficinas y dejaron más pintas.
"Ya vas a ver, las balas que nos tiraron van a volver", cantaban algunos frente a los vehículos en llamas.
Mientras tanto, bomberos intentaban alejar al contingente para evitar accidentes. "Vivo se lo llevaron y muerto lo regresaron", y "Alfaro ratero, asesino del pueblo", fueron otras de las consignas que exclamaban.