El proyecto de cooperación y desarrollo impulsado por el gobierno de México para enfrentar las causas estructurales de la migración, cuenta con un plan: reunir 45 millones de dólares de instancias públicas y privadas.
Ese es el cálculo de la CEPAL, el organismo económico para América Latina de la ONU, que ha auspiciado un proyecto nacido de un primer acuerdo en 2018.
“Este no es un plan de la CEPAL, si no de los gobiernos. Nosotros sólo estamos acompañando”, ha subrayado este viernes la secretaria del organismo, Alicia Bárcena, tras la presentación oficial del programa, ante una representación de altos funcionarios de Guatemala, Salvador y Honduras, además de México.
La apuesta inicial del gobierno de López Obrador era impulsar un cambio de paradigma a través de nuevos canales de inversión en su frontera sur con el apoyo de Estados Unidos, que también incrementaría las ayudas a los países del triángulo norte de Centroamérica. La ambiciosa meta hace tres años era que el acuerdo empezara a dar resultados tangibles en 2020.
De momento, el plan presentado este viernes bosqueja un esquema de financiación para desarrollar 114 programas basados en la inversión en infraestructura, comercio y mercado de trabajo.