Más de cien personas fueron detenidas en Irán en el marco de la investigación sobre las intoxicaciones de miles de niñas en escuelas.
“Más de 100 personas sospechosas de ser responsables de incidentes en las escuelas fueron identificadas, detenidas e interrogadas”, informó el Ministerio del Interior.
La dependencia precisó que, entre los detenidos, algunos tenían “motivos hostiles”.
Las autoridades afirmaron que presumen que los ataques tenían el objetivo de “crear un clima de miedo entre el alumnado y de cerrar las escuelas”.
Los arrestos tuvieron lugar en varias provincias, entre ellas, Teherán, la capital.
El ministerio menciona posibles vínculos con organizaciones terroristas.
Por lo cual, los Muyahidines del Pueblo de Irán (MEK), un movimiento en el exilio instalado en Albania, estará en la mira.
Desde finales de noviembre del año pasado, muchas escuelas femeninas han registrado intoxicaciones, con gas y sustancias tóxicas, que han provocado náuseas, problemas respiratorios y desmayos en las alumnas, algunas fueron hospitalizadas.
Esto ocurrió en el marco de las protestas contra la muerte de la joven Mahsa Amini, en septiembre pasado, bajo custodia policial.
El dato
Panorama
Los casos se registraron en el marco de las manifestaciones tras la muerte de la joven kurda Mahsa Amini, luego de ser arrestada por llevar mal puesto el velo.
Confirman sentencia de muerte
La Corte Suprema de Irán confirmó ayer la pena de muerte contra un disidente y rebelde sueco-iraní, detenido en 2020.
“La condena a muerte de Habib Chaab por corrupción en la Tierra, gestión y dirección de un grupo rebelde y el diseño y ejecución de numerosas operaciones terroristas fue aprobada por la Corte Suprema”, indicó la agencia de prensa de la justicia iraní, Mizan Online.
“La condena a muerte de Chaab está confirmada y es definitiva”, precisó Mizan Online.
Chaab, de unos cincuenta años, es líder del grupo ASMLA (Movimiento árabe de lucha por la liberación de Ahvaz), considerado como un movimiento “terrorista” por las autoridades iraníes.
Desapareció en octubre de 2020 tras viajar a Estambul, y reapareció un mes más tarde detenido en Irán.
Tras el anuncio, el gobierno de Suecia afirmó que buscará más información sobre este caso.
“La pena de muerte es un castigo inhumano e irreversible”, expresó la cancillería de ese país.
Fuente: Excelsior