No todos los días se puede apreciar una obra maestra creada por dos grandes creativos de la industria relojera, pero afortunadamente Max Büsser de MB&F y Fabrizio Buonamassa Stigliani de Bulgari, se han unido para entregarnos una de las piezas de relojería femenina más espectaculares del año, el MB&F Legacy Machine FlyingT Allegra X Bvlgari.
Un reloj que une la fantasía y lujo de dos grandes firmas
Tanto Bvlgari como MB&F hacen gala de un fuerte carácter en sus respectivos campos, aunque también son muy diferentes. La firma con sede en Roma es conocida por su pasión por las gemas de colores talla cabujón en las creaciones de relojes joya, que expresan la calidez y la exuberancia mediterráneas, diametralmente opuestas al clasicismo imperante en la actualidad. Por su parte, MB&F, fundada en 2005, tomó la decisión de diseñar relojes radicales que exploraran un territorio conceptual desconocido en un entorno de la industria relojera caracterizado por su obstinado convencionalismo.
Así pues, las dos marcas estaban destinadas a converger en una plataforma común: la de su audacia joyera y mecánica. MB&F se centra en los volúmenes y la complejidad, mientras que Bvlgari crea modelos bidimensionales con una estética radicalmente gráfica. La elección de reinterpretar la Legacy Machine FlyingT de MB&F era, por tanto, natural y lógica, ya que la FlyingT Allegra incorpora ambas sensibilidades.
Capturando el universo en el nuevo LM FlyingT Allegra
El nuevo LM FlyingT Allegra de 39 mm por 20 mm utiliza el mismo movimiento 3-D de su antecesor, construido verticalmente, cuenta con un tourbillon volante en el extremo superior del eje y un diseño de caja abovedada de la era espacial como el original, pero ahora viene adornado con la opulencia italiana.
Un sistema de gemas grandes y coloridas orbita el tourbillon, todo engastado dentro de una galaxia de diamantes que cubre la placa principal; la combinación de piedras, que incluyen tsavorita, topacio, amatista, tanzanita, rubelita y turmalina, varía dependiendo de si opta por la caja de oro blanco de 18 quilates o de oro rosa.
Además de la caja, la hebilla y la corona, el dial de compensación también está adornado con diamantes, y el hecho de que esté colocado en un ángulo de 50 grados, de modo que solo el usuario pueda leer la hora, es quizás la única característica discreta del nuevo FlyingT.
El toque culminante: una caja de presentación que muestra el reloj en un orbe de aluminio rodeado por un gran anillo de metal cortado a chorro de agua; cuando se inclina dramáticamente sobre un escritorio o tocador, tiene el efecto de un planeta similar a Saturno de algún universo ultralujoso muy, muy lejano.
El LM FlyingT Allegra tiene un precio de 185,000 dólares y solo hay 20 piezas hechas en cada material de caja. Un hogar apropiado para una pieza rara de relojería de dos de las mentes más implacablemente creativas en el negocio.