La tendencia en el crecimiento de los casos COVID-19 registrados en las dos últimas semanas se detuvo durante los tres días recientes, por lo que la Ciudad de México no regresa al semáforo rojo y seguirá en naranja, en condición de alerta, expuso la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum.
"No estamos en niveles para regresar al semáforo rojo. El crecimiento en hospitalizaciones se ha parado. Pero tampoco estamos en condiciones de reabrir nuevas actividades. Seguimos en alerta", reportó la mandataria capitalina este viernes.
El número de hospitalizaciones permanece 40% por debajo del reportado el 21 de mayo, día en que se registró el mayor número de internamientos, mientras que los decesos están a un tercio de los acaecidos durante la misma temporada, explicó.
En tanto, los panteones civiles a cargo del Gobierno de la ciudad y los privados permanecerán cerrados durante las festividades del Día de Muertos: "La orientación a los panteones comunitarios es que permanezcan cerrados, pero las alcaldías podrán abrirlos con medidas de seguridad muy estrictas", indicó Sheinbaum.
Además, siguen estrictamente prohibidos los conciertos, así como la operación de bares y antros, por lo que serán reforzadas las inspecciones para mantenerlos cerrados.
"Un llamado a la población para que no realice reuniones de más de diez personas; hablamos de las fiestas, reuniones familiares, en donde dejen de usar cubrebocas", urgió Sheinbaum.
Tampoco serán permitidas las fiestas patronales, como la de San Judas Tadeo, agregó el secretario de Gobierno, José Alfonso Suárez del Real.