Tras la emboscada a policías en Texcaltitlán y a un grupo musical en Almoloya de Juárez, y la aparición de narcomantas en Metepec, Morena urgió a modificar la estrategia de seguridad en el Estado de México, pues es claro que la criminalidad se está extendiendo.
Maurilio Hernández, presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) en la Legislatura mexiquense, lamentó que este tipo de eventos amplíe su margen de maniobra en el territorio estatal, lo que habla de la urgente necesidad de modificar la estrategia en materia de seguridad pública.
“Somos testigos que cada vez hay más eventos de esta naturaleza y nos llama la atención, pero no es tanto que (la inseguridad) se esté acercando a la capital, el tema es que está extendiéndose a lo largo y ancho de la entidad”, precisó.
Lo anterior, en alusión a la aparición de mantas en Metepec el pasado viernes para amenazar con hacer correr sangre inocente si se insistía en continuar con la Feria Espacio Metepec 2021, al ataque armado contra el autobús de la banda sinaloense La Adictiva y, días antes, la emboscada a elementos ministeriales en Texcaltitlán.
El morenista consideró que las amenazas contra organizadores de la feria de Metepec son un acto de terrorismo a los participantes, artistas, empresarios y al público asistente, con el afán de generar el miedo y temor para suspender las actividades.
“Esto es reflejo de la inseguridad que prevalece en el Estado de México, es un fenómeno que va siendo creciente a partir de que no se han tomado las medidas necesarias que pasan por un compromiso interinstitucional donde debemos participar todos, los tres niveles de gobierno”, manifestó.
Hernández llamó a que se convoque de manera urgente a la mesa de seguridad para que se construyan e implementen estrategias más efectivas que ataquen las causas del fenómeno, con acciones más precisas y de mayor firmeza.
Desde su punto de vista, la violencia e inseguridad tienen origen social; la inequidad e injusticia social, manifestó, son pretexto para que estos grupos delincuenciales generen condiciones de terrorismo, amenaza y extorsión.
Por eso, insistió en la necesidad de regenerar el tejido social, lo que implica el rescate de los jóvenes, de los espacios públicos, de las instituciones y la recuperación de la confianza de la población como única manera de contrarrestar este fenómeno de descomposición.
“Invitamos a que se revisen las estrategias, algo está pasando porque si estuviéramos avanzando no se estarían dando este tipo de eventos de manera constante y cada vez más agresivos. Lo de Metepec y lo de los policías ministeriales son acciones que tienen el propósito de bajar la moral, el ánimo de la población para que así pierdan la confianza en las instituciones”, abundó.