El grupo parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (PRI) propuso sancionar la negligencia veterinaria con hasta 3 años de prisión y la suspensión del derecho de ejercer la actividad profesional.
La diputada Paola Jiménez, autora de la iniciativa, detalló que el castigo en estos casos iría de uno a tres años de prisión, y de seis meses a dos años de suspensión del derecho de ejercer la actividad profesional; empero, en caso de reincidencia, aplicará la privación definitiva al profesional que incurra en casos de negligencia veterinaria.
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Entre las principales acciones de negligencia hacia los animales y las mascotas, citó dar atención veterinaria o servicios clínicos y quirúrgicos sin estar debidamente capacitado, negarse a solicitar los exámenes médicos necesarios antes de llevar a cabo una operación, y administrar tratamientos o efectuar prácticas médicas que resulten innecesarias o inapropiadas según el estado de salud del animal.
También se incluye no proveer información sobre el estado de salud de las mascotas, el pronóstico de la enfermedad diagnosticada o sobre los tratamientos administrados y no solicitar interconsultas con otros profesionales cuando el animal no responda adecuadamente al tratamiento.
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Así, la iniciativa de reforma al Código Penal, remitida a la Comisión de Procuración y Administración de Justicia para su análisis, plantea que se impongan las penas señaladas en el artículo 181 de este Código, al médico veterinario zootecnista que, por negligencia u omisiones en el ejercicio de su profesión, ponga en peligro la integridad o cause la muerte de animales domésticos o seres sintientes.
La legisladora expuso que es derecho de los propietarios de los animales de compañía exigir sanciones adecuadas a la negligencia veterinaria o mala praxis; bajo esta lógica, dijo, ningún animal es sustituible o puede ser calificado como un bien, sino debe ocupar un lugar en el marco del derecho en donde sea reconocido su acceso a un servicio de salud digno.
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En México, refirió, existen entre 23 y 28 millones de mascotas, mientras 7 de cada 10 hogares tiene al menos una, si bien es común su abandono y maltrato, de manera que México es tercer lugar internacional y primero en América Latina en maltrato animal.