Ante la necesidad económica que viven muchos negocios en la capital mexiquense, algunos decidieron invertir más de 10 000 pesos en insumos como gel antibacterial, tapetes sanitizantes y señalamientos para poder reabrir sus cortinas.
El señor Juan apenas comenzó esta semana la reactivación de su negocio, ya que no contaba con ingresos para adquirir sus insumos; sin embargo, pudo hacerlo gracias a un préstamo de 15 000 pesos.
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"Es muy difícil, pero tenemos que hacer el intento. No podemos quedarnos con las manos cruzadas, y más cuando se trata del negocio que nos ha dado de comer por años".
Señala que, si bien, no adquirió grandes cantidades de insumos, cada artículo estaba ofertado muy por encima de su precio habitual.
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"El dispensador está arriba de 2 000 pesos, porque de los baratos ya no encontramos; buscamos por todas partes, pero están escasos".
Don Juan cuenta con tres empleados, de ahí que también debió hacerse de caretas y cubrebocas.
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"No he liquidado a nadie, todos merecen trabajar, y como van a estar aquí, pues cuidados. Por eso también le invertimos en cubrebocas y caretas. Salieron caras, pero no hay de otra".
Para los negocios más grandes, la inversión ha sido superior a 20 000 pesos, monto que muchas veces no es fácil de conseguir; de ahí que toman la decisión de cerrar sus puertas definitivamente.