Víctor López Arizmendi, originario del municipio de Tonatico, Estado de México, llegó cómo indocumentado a Estados Unidos, luego de pagar 200 mil pesos a un “pollero”.
El migrante mexiquense reconoció que otros de sus connacionales sufrieron de abandono por parte de los “polleros” en pleno desierto.
“Polleros con migración hay negocio, les cobran 5 mil hasta 10 mil dólares, migración se gana una parte y el “pollero” te pasa luego luego, a nosotros nos pasaron la segunda vez”, Víctor López Arizmendi, migrante mexiquense.
El abandono de los “polleros” a los braseros es una situación que siempre ha existido, así cómo un negocio redondo entre los “polleros” que dan una cuota a migración.
“Pues pasan mucha tristeza, sufren hambre, no toman agua, se muere por deshidratación y todo eso, han encontrado mucha gente muerta en Laredo en Tijuana”, agregó López Arizmendi.
Por otra parte, Corine regresó a Tonatico luego de irse por unos años a Chicago Illinois, recuerda que durante su recorrió por un monte se escondió entre la maleza para no ser descubierta y detenida por migración.
Para llegar a su destino, se hizo acompañar de un “pollero” hasta llegar al país del norte y reencontrarse con su esposo, quien hasta el momento sigue allá, donde trabajó en el campo y en la industria textil.