El Congreso local urgió al gobierno estatal a atender las denuncias de los vecinos, vigilar, detener y sancionar la tala inmoderada en la comunidad de San Miguel, municipio de Atlautla.
A propuesta de la morenista Carmen de la Rosa, el pleno llamó a los titulares de la Secretaría del Medio Ambiente, de la Procuraduría de Protección al Ambiente, de la Secretaría del Campo, y de la Protectora de Bosques, todas del Estado de México, para que, en el ámbito de sus atribuciones, intervengan urgentemente para detener la tala ilegal en esa comunidad.
PROBOSQUE, indicó, reconoce que en la entidad existen cinco zonas críticas por el delito de tala clandestina, que comprenden 21 municipios mexiquenses, entre ellas el Nevado de Toluca, Zinacantepec, Coatepec Harinas, Almoloya de Alquisiras, Amecameca, Ozumba, Ecatzingo, Ocuilan, Xalatlaco, Santiago Tianguistenco, Xonacatlán, Otzolotepec y, en los últimos tiempos, Atlautla.
Los pobladores de Atlautla, dijo, se sienten impotentes para actuar, pues han recibido amenazas de los taladores, mientras el Gobierno estatal incumple sus obligaciones establecidas en la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, y el Código para la Biodiversidad del Estado de México.
“No ha emprendido la inspección y la vigilancia forestal a que está obligado, menos aún acciones eficientes y eficaces de prevención y de combate a la extracción ilegal y tala clandestina de los recursos forestales, abandonando a su suerte incluso a las autoridades municipales en la recurrencia de tales ilícitos”, señaló.
Precisó que los mayores daños ocurren en el paraje “Cabeza de Toro”, donde se ha solicitado sistemáticamente la intervención de las autoridades estatales, sin resultado alguno.