A fin de impulsar acciones de conservación y protección de los murciélagos insectívoros de la entidad, el investigador de la Universidad Autónoma del Estado de México, Leopoldo Islas Flores, instaló 18 refugios en áreas y parques naturales, mismos que reportan resultados favorables, pues a cuatro meses de su colocación, algunos ya son habitados por dicha especie.
En conjunto con la Comisión Estatal de Parques Naturales y de la Fauna (CEPANAF), el catedrático de la Facultad de Planeación Urbana y Regional de la UAEM impulsa el proyecto “Hábitat nocturno”, consistente en la colocación de refugios en el Parque Ecológico Zacango del municipio de Calimaya y el Parque Ecológico “Hermenegildo Galeana” de Tenancingo.
Asimismo, en el Parque Estatal “Sierra Morelos” de Toluca, el Parque Natural “Sierra de Nanchititla” de Luvianos y el Parque “El Salto de Chihuahua” de Ixtapan del Oro.
Los refugios, que fueron ubicados en zonas estratégicas, están divididos en dos secciones que son compartimientos a través de los cuales los murciélagos pueden acceder. Fueron construidos a base de madera reutilizable, sin resinas ni pintura; asimismo, en cada uno de ellos puede resguardarse una colonia de hasta 150 murciélagos.
El universitario indicó que de las 138 especies de murciélago registradas en el país, el Estado de México reporta aproximadamente 48, por lo que su importancia biológica radica en ofrecer servicios ecológicos como ser dispersores de semillas, controladores de plagas y regeneradores de ecosistemas.
Mediante la colocación de refugios se obtiene conocimiento científico actualizado sobre los murciélagos insectívoros y se trata de generar a corto plazo una educación ambiental que permita transmitir a la ciudadanía la importancia de la conservación de dicha especie.
Leopoldo Islas Flores destacó que a largo plazo es posible planear la colocación de refugios en zonas urbanas, ya que los murciélagos han logrado adaptarse a sitios como fábricas abandonadas y colocarse en espacios entre muros, así como otros sitios.