En el afán de evitar que la carrera judicial esté a merced del Consejo de la Judicatura, el grupo parlamentario de Morena propuso que ya no sea éste organismo quien designe al director de la Escuela Judicial, sino que el cargo se obtenga a través del examen de oposición, y que se garantice a los interesados la revisión presencial de las pruebas para eliminar cualquier viso de preferencia, en el afán de garantizar capacidad y autonomía.
La iniciativa que pretende reformar la Ley Orgánica del Poder Judicial del Estado de México fue promovida por la diputada Elizabeth Millán, quien lamentó que muchos de los cargos al interior del Poder Judicial del Estado de México se han asignado bajo misterio y sin transparencia, cuando lo obligado es la selección de los mejores perfiles.
Para la morenista, el hecho de que el director de la Escuela Judicial es designado por el Consejo de la Judicatura de entre los magistrados del Tribunal Superior de Justicia, ha puesto en evidencia que, durante años, en el ejercicio de sus funciones se ha afectado la autonomía e imparcialidad en la toma de decisiones.
En la práctica, señaló, este cargo está subordinado al Consejo de la Judicatura, obedece sus indicaciones y, con ello, afecta la imparcialidad y genera un conflicto de interés, sobre todo en los procesos de ingreso y promoción a la carrera judicial.
Entre las atribuciones de la Escuela Judicial se encuentra la plena injerencia en la observancia de la carrera judicial, lo que engloba la vigilancia de las convocatorias y los requisitos que los servidores públicos del Poder Judicial deben cumplir para ser partícipes de los exámenes de oposición.
“Es por ello que para la profesionalización de quienes los conforman es necesario que se apliquen con total transparencia los mecanismos de selección, así como la apertura de convocatorias, puesto que esta función del Estado demanda que los profesionales en la impartición de justicia estén debidamente preparados profesionalmente”, dijo.
De esta manera, la propuesta contempla que la designación del cargo a director de la Escuela Judicial sea mediante aprobación de un examen de oposición de entre los jueces ratificados en su cargo o personas que cumplan con el perfil profesional y técnico, con el objetivo de evitar la subordinación directa de este cargo al Consejo de la Judicatura, pues el titular ostentaría el cargo por méritos propios y no por una designación directa.
Con ello, dijo, además se evitarán posibles conflictos de interés que afecten el ejercicio de sus funciones, la profesionalización y selección de quienes aspiran a entrar a la carrera judicial o quienes pretender lograr un cargo superior.
Además se plantea eliminar la condicionante para concursar por el cargo hasta en tres ocasiones, siempre que se hayan aprobado los exámenes respectivos, al considerar que resulta violatoria del derecho de la libertad de trabajo y a la aspiración de superación personal.
“Por tanto, se propone adicionar el recurso de revisión a los exámenes de oposición, por parte de los evaluados, ya que actualmente solo se encuentra previsto en el Reglamento de la Escuela Judicial del Estado de México y se aplica de manera discrecional, pues al solicitarla sólo se publican nuevamente los resultados en la página de la Escuela del Poder Judicial”, indicó Millán García.
En este entendido, la reforma contempla el derecho de revisión presencial como prerrogativa del evaluado y respeto a su derecho de audiencia, de tal manera que la Escuela Judicial otorgue una revisión transparente, demuestre la fuente y los criterios correctos de las evaluaciones al concursante.
De esta manera, se pretende evitar preferencias y favoritismos hacia quienes participan en estos concursos, respetar el principio de igualdad y proporcionar más confianza al servidor público del Poder Judicial del Estado, de tal manera que la participación por estos cargos sea más libre.
El planteamiento fue turnado a las comisiones unidas para su análisis y posterior dictamen.