Los murciélagos Phyllops falcatus debieron volar unos 235 kilómetros sobre el Océano Atlántico para llegar desde Cuba a Cozumel, donde han sido vistos en fechas recientes.
Investigadores auspiciados por el Centro de Conservación y Educación Ambiental (CCEA) presentaron en el auditorio del Museo de la Isla, Cozumel, los resultados de varias semanas de estudios, verificaciones y la publicación del artículo científico sobre la especie Phyllops falcatus, murciélagos endémicos de Cuba, presentes en Cozumel desde 2019.
¿Cómo llegaron a México?
El artículo científico publicado en la revista Zookyes arroja la teoría de que estos murciélagos llegaron a Cozumel debido a los fuertes vientos provocados por una tormenta tropical, ayudándolos a recorrer una distancia tan larga como para llegar tan lejos de su hábitat natural. Dicha investigación recibió la asesoría del especialista en murciélagos, el investigador Rodrigo Medellín Legorreta, conocido como el "Batman mexicano", quien pertenece al Instituto de Ecología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El vocero de la investigación y representante del CCEA, Noel Anselmo Rivas Camo, informó sobre los trabajos de campo realizados en Punta Sur y la zona arqueológica de San Gervasio, donde fueron registradas 19 especies de murciélagos.
Esta investigación resulta muy valiosa, pues se han obtenido datos de su comportamiento como hábitos, zonas donde habitan y su aportación ecológica a la zona, beneficiando tanto a humanos, como al medio ambiente.
Murciélagos en México
En México se han clasificado 154 especies y subespecies de murciélagos agrupadas en 3 superfamilias, 8 familias, 10 subfamilias y 55 géneros. Podría decirse que, debido a su variedad climática, el territorio de nuestro país es el lugar con la mayor diversidad de murciélagos del mundo.
La mayoría de los murciélagos son insectívoros; algunos prefieren en su dieta frutas maduras; otros, la mies y el polen de las flores; algunos más se alimentan de peces de agua dulce o marinos; otros son carnívoros, e incluso caníbales, y los menos se alimentan casi exclusivamente con la sangre de algunos vertebrados.