A mediados de este mes, la noticia de que la Universidad de Barcelona (UB) se encontraba preparando los últimos detalles para llevar a cabo un experimento científico que implica el sacrificio de 32 perros de raza beagle provocó una ola de indignación en redes sociales.
Tras su difusión, el tema escaló en el debate público, y diversos grupos a favor de los animales convocaron a manifestaciones en protesta por la vida de los cachorros: 16 hembras y 16 machos con una edad promedio de 8 meses.
Ante esta situación, la UB emitió un comunicado en el que, sorpresivamente, mantenía su postura a propósito del experimento.
De acuerdo con la institución, el objetivo de su prueba es “desarrollar curas para enfermedades fibróticas y analizar los órganos de los caninos de raza beagle”. Además, la Universidad explicó que el experimento no depende al 100% de ellos, sino que “corresponde a una entidad alojada en el Parc Científic de Barcelona”.
Un par de días después, el medio español El País reveló que la empresa en cuestión es Vivotecnia Research, un laboratorio con sede en Madrid que en noviembre de 2021 fue seleccionado por la UB, a través de un concurso público, como la empresa encargada de realizar ensayos en perros.
La UB también señaló que si bien, el experimento aún sigue en pie, la información que aseguraba al 26 de enero como su fecha de inicio es imprecisa. En su lugar, la institución asegura que actualmente el estudio se encuentra en una fase de experimentación y por lo tanto, su inicio está previsto para el mes de marzo, esto mientras se elabora “el protocolo de trabajo”.
De igual manera, aseguraron que en estos momentos la práctica con animales es “insustituible a fin de garantizar el progreso científico, especialmente de la biomedicina”, por lo que el sacrificio de los cachorros continua siendo una posibilidad real.