Un equipo de psicólogos de las Universidades de Sussex y Portsmouth, Reino Unido, realizó dos experimentos cuyos resultados determinaron que si una persona entorna los ojos y parpadea lentamente frente a un gato, le ayudará a establecer contacto con cualquier felino, pues los expertos indicaron que esta acción equivale a una sonrisa para ellos.
El primero de estos experimentos se llevó a cabo con la participación de 21 gatos acompañados de sus dueños. Durante este, los especialistas mostraron a los participantes la técnica de cómo entornar y parpadear y, posteriormente, los dueños la aplicaron a una distancia aproximada de un metro de sus mascotas.
Los psicólogos observaron que esta acción aumentaba la probabilidad de que el minino le contestara a su dueño de la misma manera, en comparación con el momento donde no interactúan para nada.
Tras el segundo experimento, donde los dueños fueron reemplazados por los investigadores, los psicólogos determinaron que la misma acción les ayudó a establecer contacto con los felinos, aumentando las posibilidades de que los gatos les respondieran entornando los ojos y se acercaran a ellos.
Tasmin Humphrey, una de las autoras principales del estudio, destacó que “entender las formas positivas en las que gatos y humanos interactúan, puede ayudar a mejorar la comprensión pública de estos animales y mejorar su bienestar”.
Asimismo, Humphrey compartió dos posibles teorías sobre el porqué los gatos entornan la mirada de esta manera: la primera apunta a que los gatos notaron que los humanos evalúan esta acción como positiva para, después, ser recompensados; la segunda indica que los mininos entornan sus ojos para interrumpir una mirada prolongada, que podrían considerar como una señal de amenaza.