Los nudibranquios (branquias al desnudo), también conocidos como babosas marinas, tienen formas y colores que parecen sacados de historias de fantasía. Algunos son capaces de emitir luz.
No poseen ningún tipo de concha. Muchos son venenosos y otros tantos hacen pensar que lo son, con esos colores. Son hermafroditas y habitan en casi todos los mares del planeta.