Este lunes, el comité de expertos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) emitió una directiva que, por primera vez, establece claramente que los estados del mundo tienen la obligación de proteger a los niños de daños climáticos y medioambientales.
También se afirma que las autoridades tienen el deber de preservar los derechos infantiles frente al cambio climático, causado por las actividades económicas y/o empresariales.
Para lograrlo, resultará necesario que los países miembros de la ONU cuenten con leyes y medios que garanticen que las compañías, ya sean nacionales o extranjeras, respeten los derechos de los niños, particularmente el de vivir en un mundo limpio, sano y sostenible.
“Se deben tomar medidas inmediatas cuando los niños sean identificados como víctimas y así prevenir más daño a su salud y desarrollo, y reparar el daño hecho”, se lee en la opinión jurídica.
“El comité reconoce que hoy día los niños encuentran obstáculos para reclamar sus derechos, y por lo tanto recomienda a los gobiernos la creación de iniciativas para que ellos puedan acceder a la Justicia al momento de sufrir un daño medioambiental”, continúa.