WrestleMania 41 vivió uno de sus momentos más sorpresivos cuando Rey Mysterio quedó fuera por lesión, dejando su lugar a otro mexicano: Rey Fénix. La decisión causó revuelo, pues el joven luchador de Ecatepec, Estado de México, haría su debut en el evento más importante de la WWE.
Desde su entrada al Allegiant Stadium, Rey Fénix mostró energía, actitud y una sonrisa inconfundible. Su combate frente al imponente Grande Americano fue vibrante, con dominio alterno, acrobacias espectaculares y una intensidad digna del evento. Incluso contó con el respaldo del Hijo del Vikingo, quien intervino tras una agresión previa del estadounidense.
La pelea no fue sencilla. Aunque Fénix ofreció una actuación destacada, su rival usó artimañas para llevarse la victoria: golpeó al mexicano con un objeto oculto en su máscara mientras el árbitro no miraba, logrando la cuenta de tres. A pesar de la derrota, el debut de Fénix fue aplaudido por miles.
Esta presentación marcó un antes y un después para Rey Fénix, quien ya tenía renombre en empresas como AAA, AEW y Lucha Underground, pero nunca había estado en WrestleMania. La lucha representó una vitrina internacional y dejó claro que el talento mexicano está más vigente que nunca.
Con su participación, la WWE también abrió la puerta a AAA, que apareció en pantalla durante el evento. El Hijo del Vikingo tuvo una presencia significativa y apoyó a Fénix en todo momento. La lucha libre mexicana dejó una marca importante en Las Vegas.