El caso entre Dani Alves y los Pumas de la UNAM ha llegado a su desenlace. El Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) falló a favor del club mexicano y dictaminó que el exdefensa brasileño deberá pagar una indemnización por los daños ocasionados tras la rescisión de su contrato en 2023.
El comunicado oficial del club explicó que la decisión del TAS, notificada el pasado 1 de septiembre, revoca la resolución de la FIFA emitida en mayo de 2024. En aquel momento, la Cámara de Resolución de Disputas había limitado la compensación, pero ahora la nueva sentencia establece una cifra más elevada en favor de los auriazules.
La salida de Alves de Pumas se dio en medio de una polémica, luego de que fuera acusado de agresión sexual en Barcelona a finales de 2022. Si bien el futbolista fue absuelto en marzo de 2025 tras inconsistencias en el proceso judicial, el daño a la institución ya estaba hecho.
El club reclamó entonces una indemnización de cinco millones de dólares por incumplimiento contractual y afectaciones comerciales. Aunque en un inicio parecía improbable que prosperara, el arbitraje internacional ratificó la validez de la rescisión con justa causa y le dio la razón a los universitarios.
Con este fallo, Pumas no solo obtiene un beneficio económico, sino también un respaldo a su gestión directiva, que defendió sus intereses frente a uno de los jugadores más exitosos del futbol mundial.