Si actualmente estás en busca de un smartphone, computadora, tablet o consola de videojuegos, quizá has visto que en el mercado existen diferentes versiones de un mismo producto pero con la palabra “reacondicionado”.
Estos dispositivos suelen tener un precio más reducido que uno nuevo, y por esa misma razón resulta más atractivo para los compradores; sin embargo, también puede generar cierta desconfianza, sobretodo si se trata de la primera vez.
Por este motivo, aquí te compartimos los pros y contras de adquirir dispositivos reacondicionados. ¡Presta atención!
¿Qué significa?
Primero que nada, es importante definir que un producto reacondicionado (refurbished, en inglés) es aquel que, originalmente, salió a la venta pero tuvo alguna falla.
Otra cosa a tomar en cuenta es la diferencia entre usado y reacondicionado, pues el primero consta de un producto que ya pasó por uno o varios usuarios, mientras que el segundo fue probado y certificado por su fabricante original.
Pros
Como mencionamos anteriormente, la primera y principal ventaja de este tipo de dispositivos es el precio, lo anterior debido a no ser totalmente nuevo.
Otra razón es la calidad del mismo, toda vez que éste fue recogido, arreglado y nuevamente puesto a la venta por la compañía creadora. Eso sí, nunca estará de más revisar las condiciones de garantía.
Contras
Una de las grandes desventajas de los productos reacondicionados es que se trata de algo no nuevo y lo recomendable es asumirlo así. Puede que el gadget haya sido usado durante semanas o incluso meses, y que algunos componentes, como la batería, muestren un mayor desgaste.
Lo mejor en estos casos es asegurarse del estado actual del dispositivo en cuestión: si se encontraba en exhibición, si fue devuelto por un comprador anterior o si lo único que sufrió daño fue el empaque, por poner unos cuantos ejemplos.