Netflix continúa trabajando en la implementación de su plan para ya no permitir a los usuarios compartir contraseñas con perfiles que no se encuentren en la misma ubicación, con el propósito, también, de convertir a algunos de estos consumidores en clientes que pagan.
De acuerdo con el sitio The Wall Street Journal, a partir de 2023 la plataforma de streaming comenzará a pedir a las personas que paguen por esta función.
Inicialmente, detalla, este movimiento sólo se aplicará en Estados Unidos, donde poco más de 30 millones de usuarios se encuentran compartiendo contraseñas junto con Canadá.
Como criterio para decidir quién deberá pagar, Netflix revisará tanto las direcciones IP como los identificadores de los dispositivos, así como la actividad de la cuenta, presionando gradualmente a fin de evitar dicha práctica.
Es importante mencionar que, por el momento, no se tiene definido cuánto deberán desembolar aquellos usuarios que comparten su contraseña, pero algunos expertos especulan que la tarifa podría rondar los tres dólares mensuales, tomando en cuenta algunos mercados sudamericanos en los que ya se está probando la función de compartir plan hasta con dos personas adicionales.