Como una nueva forma de proteger a los usuarios de los ciberdelincuentes, este lunes el gobierno de Reino Unido prohibió que los dispositivos conectados a internet tengan contraseñas “fáciles” de recordar por defecto.
“A partir de este día, entrarán en vigor las regulaciones que hacen cumplir la protección del consumidor contra la piratería informática y los ataques cibernéticos, y exigen que todos los dispositivos inteligentes conectados a internet cumplan con los estándares mínimos de seguridad establecidos por la ley”, señala el documento oficial emitido.
De acuerdo con las regulaciones aprobadas, de ahora en adelante los fabricantes tendrán la obligación de proteger a sus usuarios de los peligros de internet. Para ello, tienen prohibido configurar códigos de acceso débiles o fáciles de adivinar en los dispositivos conectados a internet.
En ese sentido, las autoridades pusieron como ejemplo las contraseñas “admin”; “12345”; y “Password”. Si hay una clave común, se tendrá que invitar a la persona a cambiarla al iniciar su equipo.
Con estas leyes, Reino Unido se convierte en el primer país a nivel mundial en proteger a los usuarios de las contraseñas por defectos que vienen en los dispositivos móviles.