En medio de los trabajos de construcción del Tren Maya, específicamente en el Tramo 1 que corresponde al estado de Chiapas, investigadores del Instituto Nacional de Antopología e Historia (INAH) desenterraron una cámara funeraria maya que data de hace 2,500 años, conformada por dos tipos de entierros, un nicho y varios artículos.
De acuerdo con la dependencia, el hallazgo tuvo lugar en las inmediaciones de la Zona Arqueológica de Palenque.
Al interior del entierro primario, los especialistas reportaron el descubrimiento de un esqueleto humano masculino íntegro. Mientras que los restos correspondientes al entierro secundario pertenecen a una mujer. Aunado a ello, se encontró una ofrenda y un nicho con figuras hechas a base de piedra verde.
Pese a que la cámara funeraria no cuenta con las dimensiones del entierro de Tikal, en Chichén Itzá, el INAH considera que este es uno de los hallazgos arqueológicos más importantes que se han registrado en lo que va del 2023.