La cultura del aplauso
Tráfico obligado
- Es extraño que siendo un partido de "izquierda" y habiendo promovido iniciativas en ese sentido, el grupo parlamentario de Morena a nivel local no enlistara en su agenda del próximo periodo ni los matrimonios igualitarios ni la Interrupción Legal del Embarazo (ILE). Maurilio Hernández, su coordinador, tampoco habló sobre las leyes ISSEMyM y de la UAEM, que tanto ruido han causado incluso por los manejos financieros en ambas instituciones. Tiene contemplados 140 temas de los que, sin embargo, no se puede esperar mucho, pues una cosa es que los promuevan y otra que los desahoguen. La mayoría de los asuntos, hasta ahora, en la anterior y en la actual Legislatura, donde Morena ha sido mayoría, han quedado en la congeladora o en puntos de acuerdo. Cantidad no es calidad.
- Es común que funcionarios de elección popular realicen obras de relumbrón para recibir vítores y aplausos de la población beneficiada, sin embargo, la constante en todos los niveles es dejar en el olvido las comunidades más necesitadas, las que verdaderamente requieren atención o los temas donde no se ve la inversión, pues invertir en esas comunidades o en esos lugares difícilmente atrae reflectores y publicidad, situación que se ha palpado fuertemente durante la actual administración municipal en Toluca, donde se privilegia el arreglo de las zonas céntricas, donde las obras se ven, pero se deja olvidadas a las comunidades, porque los gobernantes todo tienen, pero no pueden dejar de lado la cultura del aplauso.
- Ante las reparaciones que se realizan en la plaza de los mártires y la imposibilidad de que manifestantes se planten en este lugar, el gobierno estatal previó cualquier sorpresa e inicio obras de repavimentación en Lerdo, situación que ha causado severos problemas viales, sin embargo, ha cumplido con su cometido, pues evita la presencia de manifestantes, sobre todo ante la cercanía de los festejos por el 15 de Septiembre y posteriormente del informe de gobierno de Alfredo del Mazo. La realidad es que su técnica es efectiva, pero los ciudadanos, como siempre, son los que pagan las consecuencias, pues en ciertos horarios el tráfico es insoportable, principalmente ante el retorno de escolares.