Este descubrimiento se llevó a cabo por investigadores de la Universidad de Bristol, en Reino Unido.
Los machos de muchas especies, humanos incluidos, se rodean de parejas más jóvenes que ellos. En los grillos, este comportamiento no es una excepción. Sin embargo, aunque los grillos mayores son más irresistibles para las hembras, practican menos sexo que los jóvenes.